Valorar nuestro esfuerzo
"Desempolvando" mis archivos de fotografía y comparando mis primeras fotos con las más recientes, me hizo pensar y darme cuenta en lo mucho que he subvalorado mi proceso de aprendizaje en el arte de la fotografía y lo dura que he sido conmigo misma cuando las fotos no me salían como yo esperaba. Aprender y desarrollar un talento toma tiempo, y al inicio estarán los errores, los fracasos más sobretodo la desmotivación y el sentimiento de incapacidad.
Gracias a que he aprendido con los años a aceptar mi proceso de aprendizaje, he logrado mirar mis primeras fotos con un ojo más crítico y constructivo, valorando mi esfuerzo, mi entusiasmo y mi curiosidad por aprender y por mejorar.
Creo que es importante que de vez en cuando se mire al pasado y se valore el propio proceso de crecimiento en vez de lamentarnos por los errores, personalmente, no me quiero olvidar de cómo me sentía y lo que pensaba, porque es gracias a esos sentimientos y a esa motivación que me han empujado a seguir intentando y a seguir luchando para dar lo mejor y hacer arte con la fotografía, y no solamente, más también en mi carrera, en mis relaciones y sobre todo conmigo misma.
Tratar de no desvalorizar el esfuerzo que nos ha llevado a donde estamos, incluso si todavía no hemos llegado a la meta final. Todas nuestras acciones, por pequeñas que sean, tienen una gran importancia, un gran impacto en nuestras vidas y también una consecuencia específica que nos ayudan a llegar a nuestro objetivo.
El primer paso, la primera piedra es importante, pero la clave está en el siguiente paso, la siguiente piedra, dia tras dia con paciencia y perseverancia, con esfuerzo y decisión.
Otra clave importante es conocer nuestros límites, nuestras capacidades y nuestros talentos, para no desilusionarnos y perder la motivación, para luego juzgarnos fuertemente cuando no hemos podido hacer algo que no ha sido coherente con lo que tenemos y lo que somos.
A veces me digo a mi misma, “no te pidas lo que no te puedes dar, trabaja con lo que tienes y con lo que eres, sácale provecho, si te caes vuélvete a levantar y aprende de ello, no te apresures más ten paciencia y persevera que poco a poco podrás ver los frutos de tu esfuerzo”
Las fotos a continuación las tomé cuando estaba en USA, cuando compré la cámara me acuerdo mucho del entusiasmo que sentí de poder finalmente tomar fotos y congelar historias y objetos, me acuerdo que quería capturar todo lo que veía olvidándome de prestar atención a la parte técnica, que después poco a poco fui tomando en cuenta.
La fotografía no es mi profesión, es más mi hobby, pero aún siento aquello que sentía al inicio y hoy por hoy estoy orgullosa de mi proceso y de mi esfuerzo por querer aprender cada vez más la técnica y de esta forma, dar más de lo que puedo dar.