Conociendo a nuestros hijos, conociéndonos a nosotros mismos
La tarea de conocernos ya sabemos que nunca acaba, y los padres tenemos la oportunidad de conocernos a nosotros mismos a través de nuestros hijos. Aquello que a ellos les conmueve, muy seguramente nos conmueve a nosotros, aquello que a ellos les gusta, su temperamento, sus retos, sus talentos … lo llevamos en la sangre como antes se decía, en los genes como ya se sabe hoy en dia.
Hace un tiempo mi hija menor se leyó un libro para el colegio, se lo devoro en un día diría, y no cabiendo en su alegría me pidió que lo leyera. Que les puedo decir, al principio me dio una pereza y pensaba: “como si no tuviera yo ya mucho que leer, me cuesta leer lo mío ahora para leer un librito juvenil, ademas ella no lee lo que yo quisiera que leyera y ¿tiene la osadía de pedirme ahora que lea lo que ella quiere? es que a veces los hijos tienen mucho morro. Me hace ojitos de ¨bamby¨, esos que lo derriten a uno y me desarme de todos mis razonamientos lógicos para sucumbir ante sus deseos. Me puse en ello y me arme de otros razonamientos lógicos como: “bueno pues … aprendo aleman, nuevo vocabulario y expresiones, que más da,” puse en práctica lo que Maria Clara explica en el artículo de una mente proactiva. “Tendré que hacer que las cosas pasen ¿no?.”
Comienzo yo mi lectura y con ella la aventura de darme cuenta que el librito este me estaba gustando a mi también. Comenzamos a tener un medio con el que conectar. ¿Como vas? me preguntaba mi hija, ¿ya llegaste a la parte donde Josephine se hace amiga de Nadine?, ¿No te parece muy lindo como se comunicaban con emojis porque no hablaban el mismo idioma?.
Es que para conocernos a través de lo que tenemos a la mano, ya sea nuestros hijos, nuestros padres o hermanos, nuestra cultura, nuestro trabajo, amigos, etc, necesitamos una mente proactiva, una disposición interna que nos permita darle la vuelta a cada situación para sacar de ella lo mejor.
Y asi terminó hoy esta pequeña reflexión, de aprovechar cada oportunidad por insignificante que parezca, de conocernos y conectar.